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Cuando compramos o nos regalan un mazo nuevo de cartas del Tarot, lo primero que debemos hacer es limpiarlo de todas aquellas energías que hayan pasado por él. Asimismo, comprobarás con su uso que las cartas pueden ponerse cabezotas y que no se entregan como deben. Esa es otra señal de que su energía no funciona y de que, por lo tanto, necesitan ser limpiadas. Siempre que hagamos rituales de energía y limpieza el mejor momento para ello es la luna llena.

 

Método 1

las cartas del tarot es preferible que estén extendidas sobre el paño en las que habitualmente las envuelves. la luz de la luna llena tiene que reflejarse en las cartas. tendrás que buscar el lugar adecuado.

una vez que la luz de la luna llena alcance las cartas extendidas y arriba, llega el momento de la visualización.

cierra los e imagina como la fuerza del universo penetra en cada una de las figuras del tarot. imagina como se renueva su energía  y piensa en el poder que van a tener a partir de este instante y la ayuda que van a ofrecer a los consultantes.

medita hasta que  sientas internamente que la carga de energía se ha producido.

una vez finalizado el proceso, envuélvelas en su paño y déjalas reposar durante el resto de la noche.

 

Método 2

en esta ocasión utilizaremos una vela de blanco.

extiende las cartas de la misma manera que te indicamos antes, no olvides extenderlas sobre el paño en la que habitualmente están envueltas.

utiliza también incienso de sándalo, cuarzo rosa y una copa de de las más antiguas que tengas en tu .

enciende la vela blanca con una cerilla de madera. sitúa alrededor el resto de que hemos indicado con anterioridad.

sitúate de forma cómoda frente a la vela blanca. con armonía coge cada una de las cartas y pásalas lentamente sobre el humo que desprende el incienso de sándalo.

mientras realizamos esta acción con cada una de las cartas, tendremos que visualizar como se cargan de energía. a la vez podemos pronunciar en voz baja la siguiente frase:

“que los elementos del universo carguen mi tarot para ser utilizado con propósitos positivos y ayude a seguir el  correcto al consultante”.

 

Limpiar las cartas con agua y sal

Si necesitáis limpiarlas pero llueve o no tenéis tiempo para dejarlas un día a la luz del sol y de la luna podéis utilizar este método, algo más laborioso pero también efectivo.

Es muy sencillo, se trata de llenar un vaso con agua y un puñado de sal gorda.

Luego, con un trapo blanco o servilletas blancas, (el color es importante) humedecéis el trapo en el vaso y limpiáis las cartas una a una.

Veréis que las cartas recuperan mucho color, y es que esta es la forma de limpiar las cartas de forma física y no solo energética.

Cuando las hayáis limpiado todas las cartas las disponéis como un abanico y las agitáis 9 veces.

 

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